¿Qué necesitas llevar a la piscina?
Lo más obvio es tu bañador y una toalla, pero es probable que necesites algunas cosas más. No olvides tus gafas de natación, porque estas te facilitan mucho el entreno o tu tiempo de nadado, además de una botella de agua y algo para picar para mantenerte con energía. En cuanto a los artículos de aseo, contrarresta los efectos del cloro que resecan tu piel, con una crema de ducha hidratante y un buen champú.
1. Una buena bolsa de natación
Lo importante es que sea de tela ligera: querrás colgarte la bolsa sin complicaciones. Podría ser una mochila que te sirva como mochila normal para el día a día, en la que puedas llevar otras cosas como tu ordenador portátil y tu cartera.
¿Qué tal una abertura en la parte trasera?
Esto puede ser ideal para acceder rápidamente a los artículos que, de otro modo, quedarían atrapados en el fondo. O tal vez prefieras una bolsa de viaje más sencilla o una bolsa fabricada con malla de tejido abierto de secado rápido. En cualquier caso, necesitarás varios bolsillos y una sección impermeable para guardar tu equipo mojado después.
2. Traje de baño
Aquí hay muchas opciones. Si tu ropa de playa habitual no te sirve, busca un diseño que te resulte cómodo para nadar, hacer ejercicios o cualquier otra actividad que te apetezca probar. También es importante cuidar tu traje de baño. Después de salir de la piscina, enjuágalo con agua fría para eliminar el cloro. Luego, cuando llegues a casa, déjalo secar bien antes de guardarlo, ya que de lo contrario podrían aparecer bacterias y moho.
3. Goggles
Cuando se trata de proteger los ojos, las gafas de natación son la única opción. Para evitar que entre agua, elige unas que tengan una ligera succión y ejerzan una presión uniforme sobre la cara. ¿Sabes que a veces se empañan? Para proteger la capa antivaho de las lentes, lávalas suavemente con agua tibia después de nadar y guárdalas en su estuche protector.
4. Accesorios de entrenamiento
Es posible que tu piscina ya los tenga. Si no es así, considera llevar algunos para añadir variedad a tus ejercicios acuáticos. ¿Te apetece un reto? Las palas para los dedos añaden resistencia y fortalecen los brazos y los hombros. Del mismo modo, los pullbuoys se centran en la parte superior de los brazos (incluidas las «alas de bingo») al reducir el movimiento de la parte inferior del cuerpo. En cuanto a las piernas, prueba con una tabla o un par de aletas que te exigirán un esfuerzo adicional.